Barbie: Una Navidad Perfecta (2011)

Barbie y sus hermanas planean ir a la ciudad de Nueva York a pasar la Navidad con la tía Millicent. Emocionadas preparan todo y después de un viaje en avión que se desvía a otra ciudad a causa de una tormenta de nieve, Barbie y sus hermanas no tienen otra opción para llegar a Minneapolis en coche.
La nieve se apodera del camino y no pueden continuar más, entonces encuentran una cabaña donde piensan poder hospedaje y pasar la noche; ahí conoce a Christie la dueña del lugar quien las recibe con gran alegría y espíritu navideño. En ese lugar se encuentran colocando el árbol de navidad, regalos por lo que las chicas se emocionan por tener un aire mágico.
Barbie promete a sus hermanas que tendrán una Navidad perfecta, aunque no sea en Nueva York. Preocupada, Barbie no puede dormir y decide salir de la habitación; al encontrarse con Christie le dice que no quiere decepcionar a sus hermanas pero que sabe que no podrán llegar a su destino como lo tenían planeado. Ella anima a Barbie para pedir un deseo a una estrella: Barbie pide tener una Navidad perfecta.
A la mañana siguiente, el día de Nochebuena, Skipper le dice a sus hermanas que su vuelo con destino a Nueva York se cancela a causa de exceso de nieve. Stacie y Chelsea se enojan pero Barbie intenta mantener su alegría y salen de la cabaña esperando para distraerse un poco. Así lo hacen y encuentran cosas mágicas como un granero lleno de regalos envueltos.
Cuando regresan, a la posada se encuentran más contentas, deciden ayudar para la fiesta de navidad que habrá de llevarse en la posada. Así que Skipper participará en un concierto con la banda de dos chicos que conocieron. Stacy y Chelsea harán un espectáculo con perros y Barbie ayudará a adornar el escenario.
Para el espectáculo Stacy y Skipper están malhumoradas y regañan a Chelsea por dar sus opiniones, entonces la pequeña se pone muy triste y se va lejos. Al caer la noche, sus hermanas la buscan y empiezan a desesperar porque no la encuentran y cae nieve.

Tras muchas horas, encuentran a la niña escondida en un establo y al platicar deciden perdonarse y estar unidas en esa noche especial; cuando las cuatro regresan a la posada, encuentran rastros de un trineo muy grande y el granero, donde había regalos, está convertido en un precioso escenario para que Skipper pueda cantar.
Las hermanas de Barbie todos realizan sus números de adiestramiento con perros y Skipper canta como nunca con la banda a la que la había invitado.
Los invitados a la fiesta de navidad están tan encantados y maravillados que aplauden como nunca. Pero la mayor sorpresa llega acompañada de la tía Millicent quien llega a pasar la Navidad con las chicas y todos se reúnen fuera de la posada para mirar un árbol de Navidad, un enorme y reluciente árbol de navidad que los une en felicidad, armonía y unión.
Barbie y sus hermanas deciden tratar de ir a Nueva York la próxima Navidad, y es así como pasan la mejor navidad de sus vidas. Una navidad perfecta.

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